No es la primera vez que presento a un pintor de manera informal, y digo pintor para generalizar, porque como habrán notado el pintor es mujer, y bien salta a la vista. Maribel Garrote, autora de estos cuadros, me dijo con mucho misterio que iba a exponer su obra en el Casino y yo me brindé a presentarla.
El presentador lo puede hacer de muchas formas: por amistad, por vanidad, de frente, por detrás, al bies, de peloteo, por interés y aún queda el “CUCO”. He oído algunas presentaciones de “PELOTEO” en las que el presentador cita tantos nombres de otros que a veces me hacen pensar en lo tonto o incluso en lo burro que he sido por haberla escuchado. Luego están los del “INTERÉS”, se prodigan en alabanzas y solo les falta pedir un cuadro por el favor. Quizá sería mejor presentarla al “BIES” y decir todas las memeces que suelen decir algunos para salir del paso o en la foto: que si el dibujo, la composición, la armonía, la luminosidad, la poesía, el buen hacer, la maestría, la técnica y de paso sacan a relucir lo buenos que ellos son con los artistas, ¡a costa de los dineros de los contribuyentes!. Por “DETRÁS”, ya sabes… aquí eres maravilloso. ¡Sublime! ¡Un portento! ¡Ni Zurbarán! ¡EL MEJOR PINTOR DE TODAS LAS GALAXIAS! Después ¡menudo petardo! ¿Quién se cree que es? ¿Cómo se atreve? Y esto último dicho tomando café en el casino o en cualquier bar de moda, donde los suyos lo escuchan. Los “CUCOS”, presumen de artistas y sólo hablan de los mediocres, de los que consideran inferiores artísticamente, de éstos dicen maravillas, siempre por puro egoísmo. Son los ególatras, los trepadores los “genios” entre comillas y lo malo es que los presentados llegan a creerles.
YO TE PRESENTO DE FRENTE. Has venido a mi estudio, al igual que otros futuros pintores, a recibir las enseñanzas basadas en los conocimientos que solo poseo por mi edad y te metí de cabeza en ese mundo mágico de la acuarela y tú te dejaste guiar, sin saber dónde entrabas. Sé que te gusta el mar, ese mar siempre desconocido que contemplas desde las rocas de Meirás o de Campelo, desde Valdoviño o desde Lago, donde el Sol nace y muere y por la noche las estrellas brillan como soles. Haces bodegones y tratas de encontrar la composición, la entonación, la calidad de las cosas y encuentras con los maestros la belleza en una cebolla o en un racimo de uvas. Luchas contra tus propias incapacidades para resolver lo que ya está resuelto, pero eres tenaz: persigues lo que otros no encontraron y quizá tú sí. Me imagino a tu cerebro analítico sabiendo lo que quieres y que la técnica no obedece. Admiro a los que como tú y en silencio se enfrentan al blanco del papel. Te atreves a pintar algo y a veces hasta quedarás contenta, pero esto dura poco, al cabo de un tiempo te das cuenta de la cantidad de cosas que has intuido y no están, quizás en el próximo cuadro lo consigas. Es la eterna lucha por crear: un puchero de barro, una joya, una pintura. Y cuanto más original crees ser, un buen día descubres que hace un millón de años alguien pintaba mejor que tú y decía más que tú. No debes desanimarte por ello, sigue trabajando y tendrás la recompensa espiritual que todos necesitamos.
Esta mujer aparte de pintar es profesora, ama de casa y buena anfitriona, aparte de otras cualidades ¡claro!. La conocí a través de Ricardo Segura quien, poco antes de morir, me pidió que me hiciera cargo de sus alumnos, y entre ellos estaba Maribel. No tenían idea de cómo se podía usar el agua, que como todo el mundo sabe sirve para limpiar los dientes –nosotros la usamos para otros menesteres tales como pintar o limpiar los pinceles- y algunos incluso la beben.
Muchos piensan que la acuarela es usada para pintar flores por señoras que no tienen otra cosa que hacer, otros creen que es un buen método para poner embarcaciones en playas de fina arena y algunos están convencidos que es la mejor técnica para diseñar tarjetas de Navidad. Nosotros tenemos otro concepto. Es un método aparentemente sencillo que nos puede introducir en el mundo de la plástica con todos los derechos. Acuarela es nombre femenino que suena a día con lluvia, a mar o a ría sin olas, parece ideal para no manchar y, sin embargo es escurridiza, cambiante y a veces sucia. Muchos creen que es fácil (y lo es) pero tardarán en poder domarla, y tardarán porque no le tienen respeto, la toman como la técnica facilona del arte. Con la acuarela tienes que ser cariñoso, amante y templado. Ella quiere pero no se deja, y se niega. Te pone a cien y te echa un jarro de agua fría. A veces cuando tienes un precioso cielo, con nubes de atardecer, empieza a llover, y le sale un sarpullido, otras, por un pequeño descuido, deja un reguero vertical, por eso tenemos que ser cuidadosos ¡Es muy delicada la puñetera! Maribel se metió en este particular mundo que le hace sudar sangre y hasta proferir maldiciones pero, eso sí, con mucha educación. Fue tenaz y aquí tenéis lo que consiguió. Esperamos que continúe por el buen camino y las maldiciones educadas se tornen en alegrías, en el supuesto de que en el arte existan. Quizá Bello Piñeiro y yo hayamos sido los culpables de esta adicción a la acuarela que impera en Ferrol, aunque algunos aún no le hayan tomado el pulso y la traten como a la hermana pobre de la familia.
DISFRUTEN DE ESTOS BELLOS CUADROS Y ENHORABUENA A LA PINTORA QUE SABE DELEITARNOS CON SU BUEN HACER.
Pepe González Collado. Ferrol 01 de marzo de 2002.